La victoria del tandilense que le permitiría adelantar en la serie al combinado argentino
El 16 de septiembre del año 2016, sin ningún lugar a dudas, marcaría una fecha sumamente recordada para la historia del tenis argentino. Ese día, comenzaba la serie que enfrentaba a Gran Bretaña y Argentina, correspondiente a las semifinales de la Copa Davis.
El duelo entre argentinos y británicos, tendría lugar en terreno escocés. Allí, en el primer punto, se verían las caras los finalistas olímpicos de Río 2016: Juan Martín Del Potro y Andy Murray. El oriundo de Dunblane, llegaba como número uno del planeta tenis y habiendo conseguido la edición anterior de la Copa Davis. Por su parte, Delpo, continuaba con su recuperación y posterior asentamiento dentro del court, con el objetivo de meterse dentro de los puestos de privilegio dentro del ranking ATP.
El match, albergaría una duración de cinco horas y siete minutos de juego. En el cual, los amantes del deporte blanco, disfrutaron de un duelo sin precedentes y con todo tipo de matices; con puntos sencillamente extraordinarios, en el que se observaban dos estilos totalmente opuestos, le permitieron a los espectadores entrar en un estado de tensión constante a lo largo del encuentro.
En este sentido, la victoria fue para el tandilense por 6-4, 5-7, 6-7 (5), 6-3 y 6-4, lo que le otorgaría al combinado albiceleste adelantarse en el marcador por 1-0. Y que a su vez, en conjunto con los triunfos de Guido Pella ante Kyle Edmund y de Leo Mayer frente a Daniel Evans, lo que catapultaría a la Argentina hacia una nueva final.
Cabe destacar, que la decisión del capitán Daniel Orsanic, en incluir a Del Potro en el primer punto sería fundamental para obtener la clasificación a la final y la posterior coronación en Zagreb para levantar la primera ensaladera en la historia del tenis argentino.
