Carlos Alcaraz levantó un nuevo trofeo. El número uno del mundo conquistó el ATP 500 de Tokio tras superar en la final a Taylor Fritz con un marcador claro: doble 6-4. El murciano cerró una semana impecable en Japón, sumando su octavo título de la temporada y llegando con el ánimo por las nubes al próximo Masters 1000 de Shanghai.
La victoria en la capital japonesa tiene un gusto especial. No solo es su primera corona en este certamen, sino que sirvió como revancha directa ante Fritz, quien le había ganado hace pocos días en la Laver Cup. Alcaraz mostró una versión muy sólida en la pista dura, sin fisuras y con su repertorio completo.
Desarrollo de la Final: Un Doble 6-4 sin Concesiones
El partido decisivo duró apenas una hora y 33 minutos. El español fue superior de principio a fin, manteniendo la agresividad que lo caracteriza y ajustando los detalles que le faltaron en el último cruce ante el estadounidense.
En el primer set, Alcaraz batalló para conseguir el quiebre, pero lo logró justo en el momento clave, en el noveno game, para sellar el 6-4. El guion se repitió en la segunda manga. El número uno tomó ventaja rápidamente con un break de entrada, consolidando la diferencia.
Fritz, aunque intentó reaccionar y recuperó un quiebre cuando el español sacaba para partido (5-3), no pudo sostener su servicio en el décimo juego. Un drop exquisito, sello de la casa, terminó por darle el campeonato a Alcaraz. Un triunfo de autoridad, sin ceder un set en la final.
La Palabra del Campeón
Al finalizar el encuentro, Alcaraz se mostró orgulloso por el nivel alcanzado en este tramo de la temporada. «Es mi mejor temporada hasta el momento, sin ninguna duda. Ocho títulos, diez finales. Eso demuestra lo duro que he trabajado desde el principio del año», comentó el español a pie de pista.
El número uno también valoró su capacidad de superación: «No empecé demasiado bien. Lo pasé mal mental y emocionalmente, pero toda la gente a mi alrededor me ha ayudado a llegar hasta donde estoy ahora«, destacó.
Próximo Destino: Masters 1000 de Shanghai
Con 67 victorias en lo que va del 2025, Alcaraz no se detiene. Su agenda marca un compromiso inmediato: el Masters 1000 de Shanghai, un torneo de categoría que promete ser un gran desafío.
