En un partido de alta tensión, se llevó la victoria frente a Laslo Djere
Tras un regreso para el olvido en el Masters 1000 de Montecarlo, Novak Djokovic decidió disputar el Serbia Open en Belgrado, con el objetivo de retomar su mejor nivel. Siendo mas local que nunca, en su debut se enfrentó a su compatriota, Laslo Djere.
El primer set trajo recuerdo del partido con Davidovich Fokina. Djere totalmente centrado, con una regularidad increíble y muy por encima de un Nole que se mostraba errático. En su lucha por tratar de jugar con profundidad, la mayoría de bolas terminaban fuera y sumando errores no forzados. El rendimiento del número 1 del mundo no se encontraba dentro del court y el publico trato de animarlo, lo cual no tuvo resultados. Con dos quiebres a favor, Laslo cerró fácilmente la primer manga por 6-2.
Borrón y cuenta nueva para el segundo parcial, donde Novak conservó fácilmente sus primero dos servicios y tuvo 3 chances de quiebres, aunque no pudo concretar ninguna. Intercambiaron servicios, con un gran nivel por parte de ambos, pero no les alcanzo para imponerse. Por ende, todo se definió en el tiebreak, donde Djokovic logró cerrarlo, con muchas dificultades.
Una pequeña ilusión se asomó en el court cuando Novak quebró rápidamente en el tercer set, pero no duró mucho, ya que cedió su servicio en el siguiente. En un duelo parejo, como dos guerreros lucharon hasta ultimo momento, sobre todo en el 5 iguales, en un game de 22 puntos que pareció ser eterno. Finalmente, el tiebreak decidiría quien avanzaría a la siguiente ronda.
La experiencia en momentos claves fue la clave de Djokovic para ganar este partido por 2-6, 7-6 (5) y 7-6 (4), en tres horas y 24 minutos de juego.
En siguiente ronda, espera otro tenista serbio, Miomir Kecmanovic, que dejó en el camino al frances Richard Gasquet y al australiano John Millman.
