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Opinión

La exigencia de lo tangible

Cuando el esfuerzo es opacado por no conseguir el trofeo mayor.

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Vivimos en una sociedad que exige lo tangible para validar el logro ajeno. El trofeo, la placa y el titulo universitario colgado en la pared debe existir para aprobar el esfuerzo de una persona. Especialmente en el deporte, el espectador cree que tiene autoridad de acreditar o desacreditar el trabajo del deportista y es muy cruel a la hora de evaluar su rendimiento. Ser uno de los mejores en tu disciplina no alcanza si no se lo certifica a través de un premio.

Casper Ruud estuvo a un paso de ser número uno del mundo (lo fue en el ranking en vivo) pero para el público tal recompensa es «excesiva» para un tenista que no ganó «títulos grandes». El noruego tiene en su haber 10 títulos ATP, galardones empañados por su «baja categoría (ATP 250)». Ruud alcanzó 10 finales mas (3 Grand Slam, 2 Masters 1000, 1 ATP Finals, entre otros) pero no es suficiente porque no se quedó con el premio mayor, desechando toda posibilidad de valorar el esfuerzo y dedicación de un atleta de elite.

¿Hay que esperar que Casper Ruud consiga los trofeos, para validar su carrera exitosa? ¿Alcanzará para un público exigente que el deportista «solamente» se mantenga entre los mejores de su disciplina, lugar que ocupa hace mucho tiempo?¿Bastará para el espectador reconocer el esmero si el logro tangible no se hace presente?

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